TIENDA ONLINE

domingo, 7 de abril de 2013

A MI ANGELOTE GUILLERMO


A veces, durante la noche, una pesadilla te sobresalta, y, aún dormido, nos llamas entre sollozos,  para rescatarte de esos sueños oscuros…Unas veces es a papá a quien reclamas, otras, a mí…
Esta noche te oí gritar “mami”; fui medio sonámbula a ver qué te pasaba, y tenías los brazos extendidos, reclamando los míos para levantarte de la cuna y cogerte entre mis manos…En cuanto te tuve encima, suspiraste inhalando mi olor, y sentí cómo te tranquilizabas inmediatamente, cómo notabas que estabas protegido y volvías a respirar pegando la cabecita a mi pecho (te encanta oír los latidos de mi corazón). Al ratito roncabas profundamente.
Estabas precioso, aún más guapo que de día, con carita de ángel, relajado. No tuve por menos que comerte a besos esos mofletes de carne prieta, tierna, que hace honor a tu apellido materno (lozana)…Verte tan indefenso entre mis brazos, tan chiquitín, y sentir lo esencial que es para ti nuestra presencia, la importancia de que estemos cuando nos necesitas, me provocó unas tremendas ganas de llorar de alegría. Me sentí tan feliz…Pensé que dentro de poco echaré de menos estos agotadores despertares nocturnos, tus desvelos. El tiempo pasa volando, y cada vez eres menos “bebé”…Llegará un día en que te de vergüencilla darme besos.
Mientras tanto, yo disfruto pidiéndotelos cuando estás despierto, y robándotelos por la noche. Haciéndote cosquillas en la tripa hasta que no puedes más y te da hipo, o esperándote con los brazos abiertos a que vengas corriendo a abrazarme desde el otro lado del pasillo con una sonrisa radiante, de esas que sólo tú sabes poner.
Inventándome que tengo “pupa” en distintos sitios para que vengas a curarlos dándome besitos, porque hace poquito que aprendiste a curar. Y preguntándote si me quieres, y oyéndote decir “sí” mientras me miras con esa carita…
De momento no me llamas pesada, ni te da corte que te achuche, así que yo aprovecho…aprovecho para quererte y para sentir cómo cada gesto de amor lo recibo de ti multiplicado por mil.
Progresas a pasos agigantados, tu mundo se amplía cada día un poco más, cada día construyes con los bloques torres más altas, chutas mejor con la pelota, conoces más palabras y entiendes conceptos abstractos. Ya sabes los nombres de toda la familia, y has aprendido quiénes son tus compañeros de guardería, y quién es la “Seño”. Te miras al espejo y tú solo te haces cucamonas, te reconoces en fotos, sabes que las abuelas te hablan por teléfono y les tiras besos…Me pides fotos de los titos, de los abus…Ves capítulos más largos de dibujos, y te das cuenta de lo que pasa. Bailas como una peonza al escuchar música,  y haces la bocina nada más montar en el coche…Te pirras por tirarte una y otra vez del tobogán, y trepas por los sofás de casa como un monete. Me ayudas a echar la ropa a la lavadora. Te llevas la cuchara a la boca, y te enfadas cuando no puedes comer tú solito.
No tengo palabras para expresar cómo llenas nuestro mundo y cómo nos alegras y nos motivas  a papá y a mí en estos días grises. Doy gracias a Dios por verte crecer sano, fuerte, cariñoso y feliz, y sólo espero y deseo poderte dar el mejor de los futuros, hijo mío. Te quiero.


2 comentarios: